El estaño sulfato es un compuesto inorgánico.
Usos: Se utiliza principalmente para colorear perfiles de aluminio mediante un proceso de anodizado; en galvanoplastia, para el estañado electrolítico; como materia prima para la producción de productos químicos de estaño; en la industria textil, como mordiente en el proceso de teñido y fijación del color en tejidos; para la producción de pigmentos de color blanco o amarillo; como catalizador en ciertas reacciones químicas.
Riesgos: El estaño sulfato provoca lesiones oculares graves, es nocivo en caso de inhalación, provoca irritación cutánea, puede provocar una reacción alérgica en la piel, puede irritar las vías respiratorias, y puede provocar daños en los órganos tras exposiciones prolongadas o repetidas. Por ello, se debe manipular con los EPIs adecuados (mascarilla para partículas, gafas, guantes y ropa y calzado adecuado).